Mutilación Genital Femenina: Crimen condicionado

05.05.2020

Cultura o delito?


En varios países principalmente Africanos existen creencias ancestrales que les obligan a practicar mutilaciones en los genitales de las niñas, de aquí nace la pregunta de si esto es un acto cultural o es un acto sádico y criminal.

Sin duda el desconocimiento de estas prácticas hace que los "occidentales", nos horroricemos por el solo hecho de escuchar mutilación, sin darnos cuenta de que también la circuncisión es un acto cultural que mutila a un varón en pro de higiene o solamente costumbre. Son tantos los actos culturales diferentes a los nuestros propios que podrían no solo parecernos extraños sino también aberrantes.

Existen culturas como las musulmanas en las que el robo se condena con mutilación de manos, o por ejemplo el ojo por ojo diente por diente que se halla inmerso en su código cultural.

En los países amazónicos, tradiciones culturales como la perforación de labios y orejas, para demarcar al hombre y a la mujer, o la misma poligamia, son factores culturales muy arraigados y que a los ojos de los "civilizados" son aberrantes.

El trasfondo cultural va más allá del criterio de quien lo mira, se convierte en un acto criminal cuando el que lo realiza es un superior jerárquico, y cuando la víctima es incapaz de decidir por sí misma, además del lugar en el que lo realiza, o más bien a sabiendas de que así lo realice en su lugar de origen, es un acto criminal en el lugar de residencia de la víctima, es decir existe una legislación concreta que la respalde.

Revisaba un documental de la India, donde se mostraba una realidad a voces, el infanticidio de niñas por el solo hecho de serlo, las madres las matan para ser aceptadas por sus maridos quienes aborrecen a sus hijas niñas pues las consideran estorbos e inútiles. En la india este tipo de actos no son reprimidos pues la costumbre para ellos prevalece a la ley; sin embargo si los padres indúes vivieran en otro país, sea España, Ecuador, Estados Unidos, donde el infanticidio es penado, no podrían estos argüir como descargo que sus costumbres así lo mandan, pues la legislación protectora es la que ejerce la fuerza, por el hecho del cometimiento de este acto en ese territorio.

Mutilación de los genitales femeninos?

El tema que nos ocupa es la mutilación genital femenina muy arraigada principalmente en países africanos, donde su costumbre ancestral les indica que deben practicar este ritual en su infancia.

"La ablación es un fenómeno social que no se llega a explicar pero que es muy difícil de combatir. Incluso los intelectuales la practican a sus hijas. Argumentan que es para impedir que las niñas sean frívolas, que no vayan detrás de los chicos y que sean infieles cuando, en realidad, se trata de una cuestión de educación y de voluntad",

"La gente argumenta que no puede levantarse contra la costumbre y, además, hay que tener presente que antes la mujer no tenía ningún derecho a la palabra, se podía hacer con ella lo que se quisiera" Doctor Michel Akotionga, Vicepresidente Consejo Nacional de Lucha contra la Práctica de la Escisión, Burkina Faso.

Si los mismos miembros de esa comunidad han considerado lo aberrante de esas prácticas, como no hacerlo quienes consideramos el carácter universal de los derechos humanos.

El hecho de que sean actos culturales arraigados por siglos, no significa ni por un segundo que sean prácticas que obligatoriamente deban trasladarse en el tiempo. Las mujeres deben ser consideradas en su estricto sentido humano, basta de pensar que el hombre en su superioridad (padre) debe tomar decisiones por nosotras, las mujeres mutiladas igual que cualquiera de nosotras tienen sus expectativas de vida no solamente personal sino relacional. O por el contrario las mismas mujeres excluyan a otras que no han sido sometidas a la mutilación genital, el creernos seres inferiores incapaces de determinar nuestro rol, nuestro accionar, no nos convierte a nosotras en menos seres humanos, al contrario los convierte a ellos a esos hombres "superiores", en ignorantes y débiles, pues con su intención de controlarnos hasta el pensamiento, demuestran su incapacidad de hacer feliz a sus mujeres, de llenarlas por completo, que es la única forma, considero yo, de que seamos fieles, leales y por sobre todo satisfagamos los deseos de nuestras parejas. El placer sexual es y debe ser mutuo, los hombres al igual que las mujeres debemos sentirnos completos para ser integralmente capaces de satisfacernos y satisfacer a otros.

Sin hablar de las consecuencias físicas posteriores, los daños que ocasiona esta aberrante práctica, a más de provocar muertes por la precariedad de su manejo, provoca hemorragias posteriores, obstrucciones de la menstruación que ocasiona infecciones internas, sin hablar del perjuicio sexual a su vida normal que tienen al momento de mantener relaciones íntimas.

Es imposible pensar que estas prácticas deban ser permitidas en países donde se pelea por la igualdad de género, qué igualdad puede haber en un acto no consentido, con el fin de satisfacer a otros (futuras parejas).

La condena debe ser agravada, por el presupuesto de género que conlleva el delito, no puede consentirse un acto violento por el fin cultural, los derechos humanos están por sobre todo factor de cultura, religión, etc.

Bravo por la abolición de esta práctica tan deplorable.

Johanna Orbe